Llevaba un tiempo agobiada, todos los veranos le pasaba lo mismo. El pelo largo no terminaba de gustarle, no le quedaba mal, al menos eso le habían dicho alguna que otra vez. Sin embargo ella lo prefería corto, sobre todo para el verano. Así que llamó a su peluquera, pidió cita y se corto el pelo... esta vez corto, corto...
No hay comentarios:
Publicar un comentario