Era una mañana de sabado, como cualquier otra. Se levantó tarde, más tarde de lo habitual. No habia hecho planes, pensaba hacer lo de todos los sabados: un poco de limpieza, un poco de tele, y un poco de trabajo.
Sin embargo, la tentó. Le propuso un viaje, nada mas y menos que a la capital, nooo a la del reino no, que esa esta muy lejos, a la capital de su preciosa provincia: ¡¡TARDE DE COMPRAS!!
No le gustaba demasiado ir de compras, nunca encontraba nada ni que le gustase, ni que le viniese. Las grandes cadenas de ropa: Mango, Zara... no eran para ella. Asi que resignada, decidió ir de acompañante.
La comida, en un chino. Después, comieza el periplo: MANGO e increiblemente un vestido que le sirve, decide comprarlo. H&M algunas veces le ha ofrecido algo, y esta vez no ha sido distinto, una camisa negra. Continuando por el centro comercial... de pronto ZARA, después de probarse un vestido que evidentemente no le servia, de pronto una falda, esta si. No podía creerlo, habia comprado en ZARA. Ya para terminar... un buen descubrimento... una tiendecita de esas en las que las tallas son normales.
Y alli iba ella, sus manos repletas de bolsas... y eso que no pensaba comprar nada.
Mis estupendas ideas. Es mejor no planificar. Simplemente actuar.
ResponderEliminar