Hay cuestiones que por mucho queramos nunca llegan. Palabras y gestos que por mucho que queramos nunca serán ni dichos, ni hechos.
Te hacen más fuerte, te haces más fuerte y piensas que ya no habrá nada que te derribe. Sin embargo en días como hoy, ella entra por la ventana, la puerta la tienes cerrada a cal y canto, y te recuerda lo frágil que puedes llegar a ser.
No hay comentarios:
Publicar un comentario