Le atraía la idea, los conocía del primer año, y les tenía aprecio. Ver tantos lugares, vivir una experiencia nueva... cuando se lo propusieron inmediatamente dijo que si. Pobrecita... no sabía donde se estaba metiendo.
Primera parada: buscar el viaje, se decide crucero por el mediterraneo. Curiosamente son carisimos... pero bueno, los niños no son conscientes de lo que tienen en casa, pero bueno ...
Segunda parada: los padres... no podía creerlo, ¿como era posible que los chavales no hubiesen informado a sus padres que querían un crucero? o mejor ¿como los padres no se habían preocupado de donde querían ir sus hijos? Aportas una cantidad económica y ni si quiera preguntas.... reproches: que las fechas son malas, que si es caro, que como que no le dan la comida fuera del barco... reproches y mas reproches...
Tercera parada: menos mal que la lotería, estaba bajo control... porque los mantecados... hubo días en los que sus sueños estaban plagados de cajas y cajas de mantecados... pero bueno salió airosa de eso.
Cuarta parada: estalla una crisis en Túnez... que hay que ver que oportunos estos tunecinos... no podían haberse esperado hasta que hubieran pagado el viaje... pero no, uno se quema a lo bonzo y en esta parte del mundo comienzan los quebraderos de cabeza (es lo que tiene el efecto mariposa)
Quinta parada: y una de las más dolorosas... comienzan las protestas por parte de los padres, que si no han sido informados lo suficiente, que si las fechas, que el tamaño del barco, que si las comidas... pero claro ninguno se persona a hablar con nadie... todo por la espalda a traición. No puede creerlo, no es posible, todas esas "dudas" se dijeron en noviembre... si no querías que fuera, haberlo dicho entonces... de pronto le asalta una sospecha, ahora entiende como los niños no se enteran de las cosas, si sus padres tampoco lo hacen...
Sexta parada: reunión de urgencia... tendrá que mantener la calma para no llamar impresentable a ninguno de los allí presentes.
